Morcilla con manzana y piñones

Una morcilla con manzana y piñones para tapear en familia o como entrante. Aunque la morcilla puede ser un poco fuerte, si tenemos cuidado de escurrirle un poco la grasa después de hacerla y  mezclarla con la manzana hace un plato mucho más ligero y agradable.

En toda España hay muy buenas morcillas, la de Burgos que lleva arroz, la dulce de Canarias, con puerro en el País Vasco ó la clásica para fabada en Asturias que encontramos casi siempre  ahumada. Yo he usado una morcilla  de cebolla,  que se puede preparar directamente porque ya viene cocida, tenía un tamaño tremendo, han salido varias raciones.

INGREDIENTES:

• 1 morcilla de cebolla grande
• 1 manzana reineta
• 3 cucharadas de piñones
• 1 patata grande
• 1 cucharada de azúcar
• 2 cucharadas de mantequilla
• 1 cebolla
• Tiras de pimiento rojo
• Aceite y sal

ELABORACIÓN:

Empezamos pelando la patata, la cortamos en láminas grandes no muy gruesas y la ponemos a freír en aceite. Cuando esté hecha la reservamos sobre un papel absorbente para que no nos quede muy aceitosa.

Aparte pochamos la cebolla cortada en juliana no muy fina junto con el pimiento, le ponemos un poco de sal y la hacemos a fuego lento hasta que esté transparente y el pimiento hecho.

Pelamos la manzana y la cortamos en dados pequeños, la llevamos al fuego en una sartén con las dos cucharadas de mantequilla, un poco de aceite para que no se queme y la cucharada de azúcar, la dejamos caramelizarse a fuego suave unos 5 minutos y reservamos.

Ponemos los piñones a tostar en una sartén  con unas gotas de aceite teniendo cuidado de que no se quemen, los dejamos solo hasta que empiecen a tomar color. Le quitamos la piel a la morcilla y la desmenuzamos sobre los piñones, le damos unas vueltas para mezclar las dos cosas y freímos unos minutos, cuando se haya hecho la morcilla le añadimos la mitad de los cubos de manzana caramelizada y mezclamos.

Para servirla ponemos en un plato una cama de lonchas de patata frita, sobre las patatas la morcilla y terminamos con los cubos de manzana que tenemos reservados, alrededor distribuimos la cebolla y el pimiento.

Esta misma mezcla queda muy buena también como relleno para empanadillas ó agregándole unos huevos, como revuelto.

Suelo hacerla como tapa para compartir, pongo un buen pan y no queda ni la muestra, me gusta mucho.

¡Hasta pronto!